Nueva estrategia para estimular la industria americana de semiconductores

Desde hace tiempo las principales organizaciones vinculadas a la industria de semiconductores en Estados Unidos han reclamado apoyo gubernamental para no perder su posición en el ranking mundial de la industria. Especialmente en las tecnologías vinculadas a la computación, el almacenamiento y las redes, cuyo avance requiere una constante evolución de los chips. Aunque ahora se suman otras nuevas áreas donde los semiconductores tienen un gran papel, por ejemplo, en la energía, la medicina o los nuevos vehículos conectados y autónomos.

Tras un largo tiempo en el que las autoridades del país no tomaron muy en serio sus reclamaciones, la actual administración decidió tomar medidas al final de su mandato, lanzando planes de estímulo para reforzar el sector. Aunque los representantes de la industria acaban de lanzar una nueva petición a las autoridades, que ha tomado la forma del denominado Plan Decenal para Semiconductores, en el que reclaman 3.400 millones de dólares anuales en fondos federales.

Estos fondos estarían destinados a abordar los grandes cambios que se están produciendo en la tecnología de chips, allanando el camino para las tecnologías emergentes como la inteligencia artificial, la computación cuántica y las comunicaciones inalámbricas de nueva generación. Esta iniciativa proviene de la Asociación de la Industria de Semiconductores (SIA) y la Corporación de Investigación de Semiconductores (SRC), que han llevado a cabo una propuesta para redirigir la financiación y los esfuerzos de investigación hacia las áreas más importantes de cara al futuro, abordando lo que consideran “cambios sísmicos” en la industria.

En su anuncio, John Neuffer, presidente y director ejecutivo de SIA, dice que “las inversiones del gobierno federal y del sector privado en I+D de semiconductores han impulsado el rápido ritmo de innovación en la industria de semiconductores de Estados Unidos, lo que ha provocado un enorme crecimiento en las economías de EEUU y del mundo. Sin embargo, a medida que entramos en una nueva era, es necesario un enfoque renovado en las asociaciones de investigación público-privadas, que permita abordar los cambios sísmicos que enfrenta la tecnología de chips”. Por ello, afirma que “el gobierno federal debe invertir ambiciosamente en la investigación de semiconductores para mantener a Estados Unidos en la cima de los semiconductores y las tecnologías que permitirán cambiar el juego en el futuro”.

En opinión de los expertos responsables de esta propuesta, las inversiones que reclaman podrían resultar en un incremento de 161.000 millones de dólares en el PIB de Estados Unidos en los próximos 10 años. Y, para lograrlo, reclaman centrar las inversiones en ciertas áreas, que son los sensores inteligentes, los chips de memoria y almacenamiento de datos de nueva generación, las comunicaciones, el hardware de seguridad conectado y vinculado a la IA y la eficiencia energética.

Como explica el Dr. Todd Younkin, presidente y director ejecutivo de SRC, “el futuro tiene un potencial ilimitado para la tecnología de semiconductores, con aplicaciones emergentes como inteligencia artificial, computación cuántica y tecnologías inalámbricas avanzadas que prometen beneficios sociales incalculables. El Plan Decadal proporciona un modelo de cómo podemos convertir este potencial en una realidad. Trabajando juntos, podemos impulsar la tecnología de semiconductores para mantenerla fuerte, competitiva y en la punta de la lanza de la innovación”.

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