La industria taiwanesa encuentra problemas para mudarse de china

  • Noticias y Actualidad

Las principales empresas taiwanesas de componentes electrónicos, como memoria, placas base y servidores, está tratando de trasladar sus operaciones de vuelta a su país de origen, para estar al margen del conflicto comercial entre EEUU y China. Pero se enfrenta a una serie de problemas, como la falta de suelo industrial, suministro eléctrico y, muy especialmente, a la escasez de trabajadores cualificados.

A raíz de la entrada en vigor de los aranceles de Estados Unidos a los productos manufacturados en China, y debido a las malas perspectivas de futuro de este conflicto comercial, las empresas tecnológicas de Taiwán calculan que continuar fabricando en China les generará pérdidas económicas. Por ello, desde hace meses están estudiando cómo trasladar sus fábricas de vuelta a su país, donde podrán continuar produciendo productos como servidores, memoria de estado sólido, placas base y otros componentes electrónicos sin que se vean afectados por los nuevos aranceles y restricciones de EEUU.

Pero en este camino se enfrentan a diversos problemas que están dificultando esta mudanza. Por un lado, Taiwán es un país pequeño, y actualmente adolece de una falta de suelo industrial en el que situar industrias tan voluminosas. Por otro, el país necesitaría incrementar su capacidad de generación de energía para poder cubrir las necesidades de estas nuevas fábricas, algo difícil de lograr en un corto plazo. Y, a estos factores limitantes, se suma que hay escasez de profesionales especializados en estos trabajos.

Aunque las empresas tienen capacidad para contratar trabajadores extranjeros, las leyes del país obligan a que la mayor parte de ellos sean ciudadanos del país, lo que está complicando la tarea de construir una fuerza laboral capacitada y eficiente. Y, con las últimas tendencias en la industria electrónica, que requiere personal con experiencia en la fabricación inteligente, este problema se agrava aún más.

Esta situación está llevando a algunos de los principales fabricantes de electrónica de Taiwán a explorar otras opciones, y algunos están considerando afincar sus fábricas en otros países del sudeste asiático, donde existen más facilidades para reducir los costes de fabricación y para contratar personal cualificado. Pero algunos miembros de la industria señalan que hay contrapartidas, ya que en la mayoría de estos países los fabricantes no podrán contar con beneficios fiscales, ayudas ni incentivos de los gobiernos locales, como sí tenían en China.

Algunos países que cada vez se ven con mejores ojos para afincar la potente industria taiwanesa son Filipinas y Tailandia, y ciertas empresas destacadas como Foxconn ya han logrado trasladar algunas de sus fábricas a India. Pero en este país, según comentan representantes de algunos fabricantes, las industrias extranjeras se enfrentan a complicadas regulaciones, dificultades en materia fiscal y a importantes diferencias culturales, que suponen importantes desafíos a considerar.

Más información

¿Cuál es el futuro del mercado de almacenamiento? ¿Qué tecnologías son las más adecuadas para las empresas? Si quieres obtener más información sobre un segmento en crecimiento puedes visitar las páginas de nuestros colaboradores: NetApp y Huawei.