El mercado de la nube pública sigue creciendo con fuerza tras la pandemia

La crisis de la pandemia ha causado grandes estragos en muchos sectores económicos, obligando a las empresa a acelerar la transformación digital para sobreponerse a las dificultades y prepararse para una nueva normalidad en la que la competencia es cada vez mayor. Uno de los principales beneficiados por esta situación ha sido el mercado de servicios en la nube pública, gracias a que muchas organizaciones han acelerado la migración de sus datos y aplicaciones a la nube para apoyar la digitalización.

Ya en 2020 se vio un gran crecimiento de la demanda de servicios en la nube, una tendencia que se ha mantenido en 2021, como corroboran los últimos datos publicados por IDC. En su último informe destacan que los ingresos obtenidos por servicios de infraestructura del sistema (SaaS, SIS) y software como servicio aumentaron un 29% con respecto a 2020, alcanzando un total de 408.600 millones de dólares. A medida que pasaban los meses del año pasado los ingresos combinados de los cinco principales proveedores cloud (AWS, Microsoft, Salesforce, Google y SAP) aumentaron rápidamente, representando el 40% del mercado global con un notable crecimiento interanual del 36,6%.

Un dato muy revelador de este último informe de IDC es que Microsoft logró hacerse con la primera posición en este segmento, alcanzando una participación global del 14,4%, seguido por el tradicional líder, Amazon, que tuvo un 13,7% de cuota. En su informe, Rick Villars, vicepresidente del grupo de investigación mundial en IDC, comenta que “las organizaciones continuaron con su fuerte adopción de servicios de nube pública compartidos en 2021 para alinear las inversiones de TI más de cerca con los resultados comerciales y garantizar un acceso rápido a las innovaciones necesarias para ser un negocio digital first”.

Y señala que en los próximos años los principales proveedores de la nube tendrán un papel clave para ayudar a las empresas a sobreponerse a las dificultades y a las disrupciones que están cambiando el panorama macroeconómico y de los negocios, como son la creciente inflación, las interrupciones en la cadena de suministro y las crecientes tensiones geopolíticas. Aunque en el futuro los equipos de TI también se centrarán en proporcionar una mayor responsabilidad financiera en relación a los modelos de gasto en servicios en la nube, ya que los costes se incrementan a medida que se superan las capacidades contratadas inicialmente.

IDC destaca especialmente que, aunque el mercado general de servicios en la nube ha mostrado este saludable crecimiento, los ingresos de los servicios de la nube fundamentales, clave para respaldar las estrategias digital-first de los clientes, han aumentado un 38,5% con respecto a 2020. Para los investigadores esto revela la creciente dependencia de las organizaciones de plataformas de innovación en la nube construidas alrededor de servicios informáticos, servicios de datos e IA y servicios de marco de aplicaciones que se están implementando masivamente para impulsar la innovación.

De cara al futuro, IDC pronostica que el gasto en servicios básicos de la nube (como IaaS y PaaS) continuarán creciendo a un ritmo más rápido que el mercado general, a medida que las empresas se apoyen más en la nube para superar las dificultades actuales y acelerar el cambio hacia los modelos de negocio digital. Dave McCarthy, vicepresidente de investigación de servicios de infraestructura en la nube y perimetrales, en IDC, comenta que “los últimos años han demostrado que en tiempos difíciles, las empresas confían cada vez más en los servicios en la nube para modernizar sus operaciones y brindar más valor a los clientes”.

Por ello, considera que esta tendencia continuará a medida que los proveedores cloud ofrezcan más formas de extender los servicios de nube a centros de datos locales e infraestructuras perimetrales. McCarthy dice que “estas opciones de implementación ampliadas reducen muchas barreras para la migración y facilitarán la próxima ola de adopción de la nube”.

Por otro lado, Lara Greden, directora de investigación de Plataforma omo Servicio en IDC, explica que “en el primer mundo digital, las empresas que se toman en serio competir a largo plazo utilizan la lente de los resultados comerciales para evaluar las decisiones tecnológicas estratégicas, lo que alimenta el ecosistema de rápido crecimiento que se ve en el mercado de la nube pública”. Y señala que los proveedores cloud se han esforzado cada vez más para mejorar la productividad de los desarrolladores y aumenta la velocidad general de entrega de aplicaciones, especialmente en el ámbito de la priorización de contenedores y servidores.

En general, como explica Eric Newmark, vicepresidente de grupo y gerente general de la división de SaaS, Enterprise Software y Worldwide Services, en IDC, las aplicaciones SaaS siguen siendo el segmento más grande y más maduro de la nube pública, con ingresos en 2021 que ahora han alcanzado los 177.000 millones de dólares. Los vientos de cola de la pandemia continuaron impulsando actualizaciones y reemplazos acelerados de sistemas más antiguos en 2021, aunque los objetivos de la empresa no han cambiado”.

Destaca que ahora “las empresas buscan aplicaciones que ayuden a aumentar la inteligencia empresarial, mejorar la eficiencia operativa e impulsar una mejor toma de decisiones”. Además, explica que los criterios clave que están impulsando las decisiones de compra actualmente son la facilidad de uso, la facilidad de implementación e integración, la optimización de flujos de trabajo, la accesibilidad a la analítica de datos y el tiempo de entrega de valor.

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