Estados Unidos busca nuevas tecnologías de memoria para la simulación

La Administración Nacional de Seguridad Nuclear (NNSA) de Estados Unidos ha dado a conocer un proyecto de investigación de nuevas tecnologías de memoria para impulsar las plataformas de supercomputación, que financiará a través de su programa de Computación y Simulación Avanzada (ASC). Este programa estará liderado por el laboratorio Nacional Sandia, en colaboración con los laboratorios nacionales de Los Alamos y Lawrence Livermore, que acaban de anunciar la firma de un contrato de investigación y desarrollo con la empresa Intel Federal LLC, una filial de Intel Corporation.

El director del programa ASC, Thuc Hoang, explica en su comunicado que “los proyectos de investigación de tecnología de memoria avanzada de ASC están desarrollando tecnologías que impactarán en las futuras arquitecturas de sistemas informáticos para cargas de trabajo complejas de modelado y simulación. Hemos seleccionado varias tecnologías que tienen el potencial de ofrecer más de 40 veces el rendimiento de las aplicaciones de nuestros próximos sistemas NNSA Exascale”.

Por su parte, el líder del proyecto Sandia, James H. Laros III, ha dicho que “este esfuerzo se centrará en mejorar el ancho de banda y las características de latencia de los futuros sistemas de memoria, lo que debería tener un impacto directo en el rendimiento de la aplicación para una amplia gama de códigos de misión ASC”. Y Anil Rao, vicepresidente y gerente general del Grupo de Ingeniería y Arquitectura de Sistemas de Intel, ha explicado que ya están anticipando los desafíos de plataforma que deberán resolverse para crear una nueva generación de tecnologías de memoria, y opina que este programa les ayudará a obtener el apoyo que necesitan para lograrlo a lo largo de la próxima década.

Otro de los miembros de Intel, Josg Fryman, profundiza más en sus avances en este campo, diciendo que están replanteando los aspectos fundamentales de cómo se organiza la DRAM y cómo se puede combinar con las plataformas informáticas para conseguir un nuevo nivel de rendimiento. Su intención es modernizar la arquitectura de los sistemas informáticos a través del estudio de los problemas más difíciles que enfrentan los científicos de estos tres laboratorios nacionales.

Dice que la memoria principal no está diseñada para las plataformas de supercomputación más modernas de la actualidad y que con este proyecto la compañía pretende dar un salto de órdenes de magnitud en el propio diseño básico de la DRAM, alcanzando un nivel de rendimiento sin precedentes. Con ello quieren establecer nuevos estándares de la industria que permitan mejorar todo el ecosistema de tecnologías de supercomputación.

Este contrato forma parte de la cartera de inversiones posterior a la iniciativa de computación a exaescala de la NNSA, con la que quiere impulsar la investigación y desarrollo tecnológico a través de su programa PathForward. Con ello quiere fomentar un ecosistema informático nacional de alto rendimiento más sólido que el actual, que se encuentra muy fragmentado. Y también impulsar la competitividad de la industria estadounidense en tecnologías HPC de nueva generación.

En el anuncio oficial, Simon Hammond, gerente del programa federal para el programa de entornos de software y sistemas computacionales de ASC, comenta que “Intel y el programa ASC tienen una larga historia de asociación para explorar nuevas tecnologías para nuestras implementaciones de sistemas HPC. El proyecto con Intel que se anuncia hoy proporcionará importantes mejoras en las tecnologías de memoria que pueden soportar nuestras cargas de trabajo de producción”.

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