Otra provincia de holanda paraliza la construcción de nuevos centros de datos

La industria de centros de datos necesita crecer, pro en regiones donde el espacio para este tipo de usos es limitado se está demostrando que el modelo de expansión tradicional es insostenible. El ejemplo más claro es Holanda, donde varias regiones clave del país están teniendo problemas para permitir el desarrollo del sector sin afectar negativamente a la economía local y la sociedad. La principal es Ámsterdam, que además es una de las principales ubicaciones de centros de datos en Europa, y donde las autoridades impusieron una prohibición de construir nuevas instalaciones durante un año, mientras se desarrollaba una nueva regulación al respecto.

Esta situación se está reproduciendo en otras regiones del país, ya que el suelo disponible para centros de datos escasea cada vez más y los gobiernos locales quieren seguir las tendencias de sostenibilidad que está impulsando la Comisión Europea para el sector, con el fin de hacer que la industria sea sostenible y no perjudique a la sociedad. El ejemplo más reciente se encuentra en la provincia holandesa de Flevoland, donde se acaba de imponer una moratoria temporal a la construcción de nuevos centros de datos. 

En este caso se persigue el mismo objetivo, que es encontrar un modelo de evolución más sostenible, que permita seguir siendo unos de los países líderes en la industria sin generar un impacto negativo en la sociedad, la economía y el medio ambiente. Por ahora no se ha desvelado cuánto tiempo dudará esta prohibición, ya que las autoridades necesitan consultar con expertos y estudiar a fondo la situación concreta de la región de Flevoland.

Esta resolución ha sido aprobada por una amplia mayoría de los representantes locales, que están cada vez más preocupados por el impacto que tienen los grandes centro de datos en cuanto al consumo de agua, energía y suelo, uno de los recursos más escasos en gran parte de un país en el que gran parte del territorio edificable ha sido ganado al mar a lo largo de mucho tiempo.

Ahora los expertos estudiarán a fondo la situación para determinar con más exactitud que hasta ahora los lugares más idóneos para la construcción de centros de datos, y el modelo operativo más adecuado para que el progreso de los centros de datos sea sostenible. Teniendo en cuenta las medidas que se están tomando en otras regiones del país, esto probablemente implicará una serie de restricciones en cuanto a la tecnología que más impacto ambiental puede generar, como la de enfriamiento, y a las políticas de consumo energético, primando las renovables y la autogeneración.

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