Los centros de datos Edge generan nuevas preocupaciones en la industria

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Desde que surgió el concepto de TI perimetral los representantes de la industria y los diseñadores de centros de datos se han esforzado para idear tecnologías específicas para la computación Edge. Y organizaciones como ASHRAE están cada vez más volcadas en el desarrollo de estándares para la construcción de sistemas como el enfriamiento o la alimentación para este tipo de instalaciones, que muchas veces se encuentran en ubicaciones sometidas a condiciones ambientales adversas.

Existen varias organizaciones clave en la industria de centros de datos, que están contribuyendo decisivamente al avance de la tecnología en el sector, como es el caso de ASHRAE. Sus miembros han ayudado a diseñar los sistemas que se utilizan en muchas instalaciones actuales, ya hora se enfrentan al desafío de materializar el nuevo concepto computación Edge. A diferencia de los centros de datos convencionales, este tipo de instalaciones generalmente se sitúan en lugares sometidos a condiciones climáticas cambiantes, como el exterior de edificios, y requieren tecnologías y estrategias diferentes en materia de aislamiento, enfriamiento y suministro energético.

El pasado octubre, ASHRAE publicó un nuevo boletín técnico dedicado específicamente a los centros de datos perimetrales, en el que los miembros del comité TC9.9 envían una advertencia a los constructores de centros de datos. Según sus apreciaciones, a menos que se sigan procesos y pautas cuidadosas y se tomen buenas decisiones técnicas, existe un riesgo de fallas significativamente alto para muchos centros de datos perimetrales. Esto cobra mucha relevancia ante el rápido avance que se espera para la computación Edge en los próximos años.

Los riesgos más serios provienen de la especial naturaleza “externa” de los centros de datos en el borde, un factor que dificulta el mantenimiento de condiciones ambientales constantes dentro de las instalaciones. Y esto cobra especial importancia durante los procesos de mantenimiento, cuando las puertas no siempre pueden permanecer cerradas. Esto incrementa el calor al que se ven sometidos los equipos, entre otros problemas.

Otro de los problemas es la resistencia general a fallos, algo que en los grandes centros de datos no es tan crítico, ya que se pueden controlar y solucionar los problemas localmente con más facilidad. Pero en la TI perimetral esto se complica bastante, ya que generalmente no hay personal cerca que pueda evaluar y solucionar los problemas. Por ello, los diseñadores y fabricantes de centros de datos Edge deben tener más en cuenta la calidad de cada componente y ciertas capacidades, como la resistencia a condiciones ambientales adversas, y a fluctuaciones de energía, entre otras cosas. Esto, según ASHRAE, se traduce en un mayor coste y dificultad para construir centros de datos perimetrales verdaderamente fiables.

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