La industria de memoria de estado sólido aún quiere tener fábricas en China
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Con el conflicto comercial entre Estados Unidos y China muchos fabricantes han comenzado a trasladar sus fábricas ubicadas en el país asiático a otras regiones, por ejemplo las marcas de Taiwán. Pero otras firmas de talla mundial van a mantener importantes líneas de producción dentro de China, y algunas marcas destacadas incluso quieren abrir nuevas instalaciones.
Los elevados aranceles impuestos por Estados Unidos a los productos manufacturados en China han llevado a muchos fabricantes de memoria a trasladar sus fábricas en el país a otras regiones, como Taiwán, Malasia o India, entre otras. Esto les está costando mucho dinero, pero les permitirá mantenerse al margen de la guerra comercial, pudiendo mejorar sus negocios con clientes de Norteamérica.
Pero ciertas empresas aún quieren mantener sus operaciones de fabricación dentro de China, la menos una parte. Es el ejemplo de Samsung, el líder del mercado NAND Flash, que no tiene pensado cerrar todas sus fábricas en el país. Incluso se plantea incrementar algunas líneas de producción de memoria.
Otro ejemplo es Intel, que ha visto reducida su capacidad de producción de memoria 3D Xpoint tras romper con su anterior socio, Micron. Y, por ahora, la marca está condicionada a las condiciones del acuerdo de ruptura con Micron, quien le seguirá suministrando obleas de 3D Xpoint hasta octubre de este año. Pero, tras esta fecha, la empresa deberá encargarse por sí misma de la fabricación de sus chips, por lo que está buscando dónde ubicar la producción de su memoria Optane, y está considerando seriamente trasladar las operaciones a una de sus fábricas más importantes en China.
Aunque sus responsables afirman que la empresa no tiene intención de incrementar el inventario de memoria de estado sólido, su hoja de ruta incluye un aumento de la producción de 3D Xpoint, a medida que se extiendan sus nuevas plataformas de procesamiento y memoria para centros de datos. Además, con el previsible aumento futuro del precio de la memoria NAND, confían en que sus productos Optane cobren mucha más importancia en aplicaciones empresariales, convirtiéndose en un estándar de la industria.
Por ello, está estudiando la forma de prepararse para un futuro crecimiento de la demanda de sus productos, para los que aún no existe una competencia fuerte por parte de otros fabricantes. En cuanto a su negocio de memoria NAND, la empresa seguirá fabricándolos, pero no tiene intención de venderlos al por mayor, sino como parte de sus propios SSD, que van muy enfocados al uso empresarial en equipos de alto rendimiento y coste elevado.
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