Cifrado inspirado en ADN para proteger los datos en la nube

Los datos deben estar absolutamente seguros en la nube, por lo que los expertos en seguridad están desarrollando nuevas formas de mejorar la protección, que generalmente se basan en esquemas de cifrado diseñados específicamente para estos entornos. Porque las estrategias convencionales reducen el rendimiento en el acceso a la información, y los clientes de la nube demandan más agilidad, sin que eso implique una menor protección para sus datos, especialmente en las arquitecturas de nube distribuida.

Buscando un nuevo enfoque que permita mejorar el equilibrio entre protección y rendimiento en la nube distribuida, un equipo de investigadores de varias instituciones académicas de India ha desarrollado un esquema de cifrado innovador. Su idea es emplear una clave de cifrado basada en ácido desoxirribonucleico (ADN) para proporcionar un marco de seguridad inviolable. Así afirman poder garantizar que los datos se encuentran absolutamente protegidos en los entornos de nube distribuida, proporcionando al mismo tiempo un gran rendimiento.

En el trabajo que han publicado en la revista Frontiers of Computer Science, los científicos explican que en los últimos años ha aumentado en gran medida la necesidad de un entorno en la nube con la capacidad de detectar comportamientos ilegales, a medida que ha ido creciendo la capacidad de almacenamiento de datos y la necesidad de una mayor seguridad. Para abordarlo, presentan este novedoso enfoque, que proporciona una técnica de cifrado “inspirada en las características biológicas del ADN y en el mecanismo de síntesis de proteínas".

Afirman que su modelo también ofrece la ventaja adicional de poder decidir sobre la selección de servidores de almacenamiento más adecuados dentro de la infraestructura existente, lo que permite optimizar los recursos y tener un mayor control sobre la seguridad. Para ello, han empleado una técnica que permite establecer una preferencia por similitud con el modelo de toma de decisiones multicriterio (MCDM) de solución ideal (TOPSIS).

Gracias a la posibilidad de escoger la ubicación física de los datos, los científicos aseguran que se puede reducir el tiempo de ejecución y mantener un nivel de seguridad superior al anterior. Asimismo, han investigado otras posibilidades que ofrecerá este enfoque para los distintos entornos de la nube, que permitirán mejorar la seguridad, teniendo en cuenta algunos criterios estándar, como el efecto de avalancha, el coeficiente de correlación, la entropía de la información, la probabilidad lineal o la probabilidad diferencial, entre otros. Sus pruebas indican que el cambio promedio en el texto cifrado es del 51,85%, y análisis más exhaustivos de seguridad, sensibilidad y funcionalidad revelan que este esquema garantiza una alta seguridad con un cifrado muy robusto.

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