Los sistemas de almacenamiento convergentes como método de lucha contra las enfermedades

Las instituciones implicadas en el desarrollo científico se enfrentan a los mismos retos tecnológicos que muchas empresas, ya que generan grandes volúmenes de datos que necesitan almacenar y procesar de forma eficiente, manteniendo una inversión contenida. Este es el caso del centro de investigación de enfermedades HZI, miembro de la Helmholtz Association, la organización científica más importante de Alemania.

En su labor de investigación de enfermedades infecciosas para obtener tratamientos y vacunas, sus diferentes departamentos acumulan grandes cantidades de información, y su infraestructura se estaba volviendo obsoleta. Sus sistemas no estaban diseñados para manejar el volumen de datos que se genera en la actualidad, tanto por capacidad de almacenamiento como por latencia. La situación estaba afectando a su eficiencia y a su productividad, algo muy negativo para una entidad que opera en colaboración con numerosas universidades, instituciones de investigación y hospitales.

El camino lógico era actualizar sus sistemas y, teniendo en cuenta las restricciones económicas de una institución que se financia con fondos públicos, decidieron realizar un concurso público para encontrar la solución más adecuada a sus necesidades. Tras valorar las diferentes propuestas, la mejor opción en términos de tecnología, servicios integrados y presupuesto fue la ofrecida por Microstaxx, basada en la tecnología de Huawei.

Como comenta Herring Dorsch, Account Manager de Microstaxx, basaron su propuesta en la utilización de dos sistemas de almacenamiento OceanStore 2600 V3, diseñados específicamente para aplicaciones empresariales, junto con un plan de migración e implementación completo. Esta solución emplea un sistema operativo orientado hacia una arquitectura cloud, hardware de alto rendimiento y compatibilidad, y una suite de software de gestión inteligente que garantiza un buen rendimiento en la gestión de grandes bases de datos, uso compartido de archivos y Cloud Computing. Todo ello desde una interfaz gráfica sencilla, disponible para los principales sistemas operativos.

Otro punto a favor de este sistema es que su diseño permite la combinación personalizada de discos duros HDD convencionales y unidades de estado sólido SSD, configurable según las necesidades específicas del cliente. Para la implementación en HZI se escogió una relación 80:20 entre HDD y SSD y, una vez aprobada su propuesta, la instalación de los nuevos sistemas se llevó a cabo en sólo tres semanas. El proceso de migración se realizó empleando la tecnología SmartVirtualization integrada de Huawei que, mediante la virtualización de los medios de almacenamiento antiguos, permite la copia de datos en segundo plano mientras se ejecutan los servicios. Todo ello bajo la atenta mirada del equipo de asistencia de Huawei, que participó en todas las fases del proceso (formación, diseño de la solución, pruebas previas e instalación).

El resultado ha sido un éxito y, seis meses después de la actualización, tanto los usuarios como el equipo de TI del HZI están muy satisfechos con el rendimiento y la fiabilidad del nuevo sistema de almacenamiento de datos. En cuanto a los costes, consideran una buena decisión haber realizado esta inversión inicial, ya que el sistema permite la ampliación de discos con un coste mucho más bajo que en otros sistemas, ya que no hay tarifas de licencia adicionales. Y este es un factor decisivo en una institución donde cada grupo científico es el responsable de obtener la financiación necesaria para los recursos de almacenamiento.

En palabras del Dr. Joachim Metge, jefe de TI de HZI, los técnicos han quedado bastante impresionados y afirman que en el futuro considerarán seguir usando las soluciones de Huawei para ampliar o actualizar sus sistemas.

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