Cabinas de datos all-flash para el nuevo centro de datos

 Además, la ecuación se complica cuando hay que añadir factores como la protección de la información, a la vez que se garantiza su acceso en todo momento. De cara a satisfacer este tipo de necesidades, NetApp ofrece su gama de productos SolidFire, donde se incluye un sistema que cuenta con amplia capacidad, junto a una gestión automatizada, que incluye distribución y equilibrio de carga de forma automática, junto con una exhaustiva API y la integración completa de la gestión. La escalabilidad de estos módulos hace posible pasar de decenas de TB a múltiples PB y así adaptarse a las necesidades particulares de cada empresa. Y esta escalabilidad se produce sin interrupciones ni periodos de inactividad. Además, se pueden combinar nodos de diferente tamaño en el mismo clúster, en el sistema se asigna el rendimiento del almacenamiento con independencia de la capacidad, y tiene capacidad para gestionarlo en tiempo real sin que ello afecte a otros volúmenes. Adicionalmente las unidades SolidFire admiten que se realice un ajuste diferenciado de cada volumen en cuanto a los valores de nivel de calidad de servicio, QoS, que se necesita garantizar en cada uno, de forma individualizada.

Esta gama cuenta de serie con el software Helix que se encarga de la protección de datos sin necesidad de crear estructuras de tipo RAID, así las funciones de recuperación y backup integrados nativos, con replicación en tiempo real, tanto asíncrona como síncrona. Con todo ello se dispone de una infraestructura ágil y escalable adaptada para poner en marcha ya sean servicios o aplicaciones de manera rápida. Y sus facilidades de administración y gestión, que incluyen tecnologías de autoservicio, hacen que muchas de las tareas estén automatizadas y optimizadas, reduciendo así la carga del personal de TI. Lo cual se traduce en menores costes de operación, ya que, como ejemplo, se indica que el autoservicio del usuario final hace que se reduzca hasta 12 veces el tiempo que se dedica a las tareas administrativas.

El elevado rendimiento viene asegurado por el empleo de avanzados procesadores Intel Broadwell-DE 6 core Processor, popularmente conocidos como Xeon D-1528 operando a 1,90 GHz cada uno, con entre 128 y 768 MB de RAM caché, según el modelo. Cada módulo tiene espacio para 10 unidades, todas de tipo SSD, con lo que el almacenamiento, all-flash, cubre desde los 4,8 TB del modelo más reducido, SF4805, a los 38,4 TB del potente SF38410. Estas cifras se refieren a capacidad nativa bruta, ya que hay que contar con las técnicas de compresión y deduplicación, que hacen que la capacidad real de trabajo se múltiple por un factor entre 5 y 10. En cuanto a rendimiento los dos modelos inferiores de la gama garantizan unas 50.000 IOPS, operaciones de E/S por segundo, mientras que los dos superiores doblan este valor y alcanzan unos 100.000 IOPS. Los módulos tienen una elevada eficiencia energética gracias al empleo de discos de estado sólido, por lo que el sistema más reducido apenas pasa de entre 130 y 230 vatios, según la carga de operaciones de E/S, mientras que los más grandes están en niveles de entre 300 y 450 vatios de consumo, aunque pueden alcanzar hasta 45 KW sometidos a máxima carga de E/S.

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